Me encanta cocinar, pero más que eso, adoro que mientras lo hago tengo la posibilidad de cortar una ramita de albahaca del jardín vertical, el que instalé en la cocina de mi pequeño apartamento.
Cuando me mudé a vivir sola, lo que más me pesó fue que mi nuevo hogar no tenía espacio para un jardín. Por eso, comencé a investigar sobre huertos urbanos colgantes.
Donde tú ves un organizador de zapatos yo vi un jardín vertical
Cuando comencé a investigar sobre cómo hacer un jardín vertical descubrí que hay un elemento básico. Sin importar el tamaño de la casa, hay que tener una ventana para que a las plantas les entre luz.
Esa fue la razón por la que decidí que mi jardín vertical debía estar en la cocina. En realidad, puede estar en cualquier lugar iluminado y ventilado. Encontré muchas ideas de manualidades para hacer la estructura que sostuviera el jardín. Algunas recomendaciones implicaban utilizar botellas de plástico o tubos perforados para poner ahí los brotes. Al final, decidí construirlo con un organizador de zapatos de lona.
Tomé mi caja de herramientas y lo clavé en la pared. En las bolsas individuales, donde se colocan los zapatos, agregué el sustrato en el que crecerían mis plantas. Ese lo compré en una tienda de jardinería.
Entonces, para redondear mi idea, lo que necesité para instalar mi jardín fue:
- Un lugar con luz natural y ventilación.
- Un organizador de zapatos de lona.
- Clavos y martillos para fijar el organizador en la pared.
- Sustrato.
- Plantas.
Verde que te quiero verde para mi jardín vertical
Un punto importante del jardín vertical fue elegir las plantas que lo conformarían. En la tienda donde compré las semillas me recomendaron especies pequeñas, ya sea flores de hoja verde o aromáticas.
Me encantó la idea de poder usar mis propios ingredientes al cocinar, así que me decidí por la última opción.
Existen dos formas de siembra. Una es plantar directamente en el huerto y la otra implica germinar la semilla y después trasplantar. Por una cuestión de practicidad, yo elegí la primera opción.
Además, hay dos épocas para instalar el jardín: cuando termina de hacer frío o cuando termina de hacer calor.
Por la facilidad para cultivarlas elegí las siguientes plantas:
- Orégano.
- Albahaca.
- Menta.
- Cilantro.
¿Cómo cuido mi jardín vertical?
Además de la luz y la ventilación, otro elemento crucial para el éxito de un jardín vertical es el riego. El sustrato es un material que mantiene nutridas a las plantas por lo que requieren menos agua que en una matera.
Si bien hay sistemas de riego automático, yo no contaba con presupuesto para ello, así que decidí hacerlo manualmente. Les pongo poca agua dos veces por semana y también las rocío con un atomizador.
Lo que comenzó como una curiosidad se ha convertido en un verdadero hobbie. El jardín vertical de mi casa me ayuda a conectarme con la naturaleza y embellece el entorno.