Esta es la historia sobre los aficionados al ciclismo y algunos consejos para seguir rodando…
Los parches de amigos funcionan como micro-países: hay costumbres y decretos que nadie votó, pero que se aprobaron. Y aunque usualmente nadie vote por nuevos y mejores hábitos, a veces sucede. El parche se junta y declara: adiós pizza, hola bicicleta. El parche dice: adiós tequila sin sentido, hola rodar por las mañanas. Y claro, todos sonríen victoriosos porque siempre está la creencia de que todo en parche es más fácil.
La resolución de mis amigos, la que vengo a contar acá, es la siguiente:
-Vamos a empezar con el ciclismo, me dicen.
Acto seguido, aparece un grupo de WhatsApp llamado Gordos en Ruedas. Imagínense cuatro adultos, con sus trajes de neopreno un domingo soleado, con las bicicletas nuevas, todos jugando a ser Egan Bernal. Hermosos no lo duden. Solo que mi parche es un grupo de gorditos felices. Les gusta la buena vida, les gusta la rumba y toda la comida que viene en el medio.
Y este grupo de amigos estaba a punto de encontrarse con varias verdades. Como por ejemplo que la dieta de un ciclista profesional suele ser muy detallada y pensada para llenarse de energía y mantener los músculos en su mejor estado. La de mis amigos, claramente, no.
Pero y entonces... ¿Qué comen los aficionados al ciclismo? Aquí vengo a regalar el secreto de todos los pedalistas criollos principiantes que andan por las rutas. Y es un secreto no tan secreto: la fuerza de los ciclistas criollos está en la comida de todos los días: Cosas tan cotidianas y nuestras como el Bocadillo veleño y la panela.
En el ciclismo aficionado todo es una cuestión de gustos y presupuestos, pero el bocadillo es el power bar, el gel recuperante. Y es que quien haya comido un bocadillo en pleno rodeo, sabe que es como inyectarse energía en las piernas. Ahora, no hay que comerse 17 bocadillos antes o después, a menos que quieran tener un problema de salud. Con uno o dos es suficiente. ¿Cómo lo sé? Gracias a mis amigos, los principiantes.
¿Por qué la panela y el bocadillo son tan populares? La respuesta es simple: son dulces y fáciles de conseguir. Y el azúcar ayuda con el desgaste para reponer rápidamente la energía que pierde el cuerpo al rodar en la bici. Solo hay que recordar una cosa: No somos ciclistas profesionales, ojo con el dulce.
Ahora, hablemos del olvidado banano, ese amigo anti-calambres: porque no hay nada que te tumbe con más ganas que un calambre. El ser aficionado implica que no siempre estamos en función del ejercicio y eso hace que los problemas aparezcan.
Algunas frutas como el banano, pero también el aguacate y la sandía contienen potasio, son buenos para evitar que el musculo haga corto circuito y nos tumbe de la bicicleta. Una vez más, imaginen a mis amigos solo que ahora están caídos en el piso. En resumen: el banano es importante si quieren empezar a rodar.
Y aunque mis muchachos terminan la jornada con un desayuno típico cargado de chocolate, huevos, carne y pan en algún paradero perdido en las montañas, hay otros alimentos más importantes y saludables para empezar con el ciclismo. No sean como mis amigos.
Lo esencial va primero: hay que tener en cuenta el músculo. Así que lo importante es consumir una alimentación balanceada que contenga buenas proteínas, como el salmón o el pollo para oxidación ayudar a mantener la masa muscular. En resumen, hay que tener una buena dieta, comerse de vez en cuando un bocadillo e hidratarse.
¿En qué terminaron mis gorditos ciclistas wannabe?
En un par de cervezas para la sed los domingos y en un amor inexplicable por sus caballitos de acero. Así que esta es una invitación a abrir ese grupo de WhatsApp y a rodar hasta con los amigos. Solo háganlo un poco más pausado y saludable que mi parche, por favor.