¿Qué es una familia? Esa puede ser la primera pregunta con la que queremos empezar a hablar. Al parecer y según algunas definiciones una familia es un grupo de individuos que, por razones diversas, conviven y son una colectividad.
¿Suena complicado? ¿Elaborado? Puede ser que sí…Las familias nunca son fáciles, pero pueden ser bonitas, pueden ayudar a cada individuo a crecer, a cambiar, a ser todo lo que quieran ser. Y por eso queremos hablar de esas familias que empiezan, de esas personas que por la razón que sea, ya sea el amor o la amistad, han decidido llamarse a ellos mismos una familia. Aquí algunos consejos y píldoras de tranquilidad para todos los que están empezando nuevos rumbos en compañía de otros seres increíbles.
¡Es un gran momento y todo, todo, va a estar bien!
Modelos imperfectos
Aquí una idea revolucionaria: nadie necesita modelos de vida perfectos. Hay más empatía, cariño y posibilidades de cambio cuando logramos mostrar que no somos perfectos. Ni padres, ni hijos perfectos; solo seres humanos que trabajan en sus emociones y sus entornos. Las casas no son perfectas, pero son perfectas cuando son lugares en los que podemos explorar.
Así que el primer consejo atemporal es este, no debemos ser el modelo perfecto, solo seres humanos empáticos y en un proceso de crecimiento y ya con ese consejo tenemos la mitad del recorrido asegurado.
Un mar de emociones
No hay emociones buenas o mala… ¡Solo emociones! Entre más aprendamos a manejarlas y expresarlas, más fácil será la convivencia para todos en la familia. Todos vivimos en un mar de emociones y es normal que venga como olas a nuestro día a día. Es porque que debemos aprender a ponerle un nombre a todo aquello que sentimos. Será positivo para nosotros y para quienes nos rodean.
Crear espacios propios
En casa es importante crear nuestros propios espacios porque, bueno, al hacerlo le estamos diciendo al mundo que tenemos un lugar y que sabemos cómo y por qué lo habitamos. Puede ser un estudio, una huerta, un laboratorio, aquí lo importante es que crear un espacio con eso que amamos ser y hacer. Porque… ¡somos lo que hacemos para hacer de este mundo un lugar mejor!
Necesitamos compañía…y soledad
Aquí una noción algo confusa, pero necesaria: necesitamos, al mismo tiempo, compañía y soledad. Y teniendo eso en mente debemos crear espacios para que todos en la casa logren tener esos que necesitan. Pueden ser cenas todas las noches para la compañía y algunos espacios para que cada quién explore lo que quiere hacer. De ahí la importancia de crear nuestro propio espacio en donde podamos ser nosotros mismos.
Todo es extraordinario
Absolutamente extraordinario. Desde un dibujo hasta los logros más grandes, cuando aprendemos a ver que todo lo que se logra es, de hecho, extraordinario, las cosas vuelven a tomar sentido y podemos sentirnos dueños de nuestros logros, así sean pequeños. ¡La felicidad puede empezar por verlo todo como si siempre estuviera repleto de colores!
Jugar es un asunto serio
Empezar una familia no es el fin de la diversión, más bien todo lo contrario. Jugar es una herramienta para resolver problemas, para hablar de cosas difíciles y sobre todo para crear recuerdos. Y las familias necesitan bonitos recuerdos.
Si existe un buen momento para volver a jugar como cuando éramos pequeños, es cuando empezamos nuevamente nuestras familias.
Estos son todos los consejos por hoy. Recuerden que la familia es todo. Siempre. Si quieren seguir explorando más contenido sobre estilo de vida y mucho más este es el link perfecto para ustedes. ¡Hasta la próxima!