Pasar al contenido principal

¿Cómo hacer una transición suave hacia el vegetarianismo?

¿Cómo hacer una transición suave hacia el vegetarianismo?
14 / Ene / 2020

El mundo está hecho de decisiones, grandes y pequeñas, pero sobre todo de decisiones personales. Y si se piensa bien son la únicas que cuentan. Al final del día solo tenemos control sobre nosotros mismos. Sobre lo que piensa la cabeza y lo que siente el corazón.

Y si las cartas están echadas y las intenciones claras, está es una guía para encontrarse con los nuevos sabores y posibilidades de entrar en una vida vegetariana. Porque la relación con la comida, una vez entramos en este mundo, cambia de significado para siempre. Así que, para hacer de este tránsito una aventura feliz, hay algunas rutas que se pueden navegar. Porque sí, nadie quiere ser ese vegetariano fundamentalista. En serio no. Uno solo quiere ser un mejor ser humano, más sano, más real. Esa es la verdadera motivación, pero hay ciertos pasos a recorrer. 

Y, si de sinceridad se trata, todos necesitamos un poco de ayuda porque el miedo al fracaso está ahí. Por lo general, el 80% de las personas que algunas vez fueron vegetarianas vuelvan a su consumo habitual de carne (lo leí en internet). Asi que la pregunta es: ¿Cómo hacer una transición suave hacia el vegetarianismo?

Con paciencia, ganas de hacerlo bien….y con estos tres trucos. 

Lo primero a tener en cuenta, es que los cambios deben hacerse paulatinamente. Disminuye el consumo de carne lentamente y para empezar, no comas carne una vez a la semana. Hay campos de batalla que podemos recorrer para lograrlo, por ejemplo con el sabor.  El tajín, la cúrcuma, el tofu, la salsa soya o el aceite de ajonjolí son elementos que te pueden ayudar y son lo que se necesita para no sufrir la ausencia de la carne. Porque la vas a sentir, así que acá un tip adicional para cuando esto pase: las hamburguesas de legumbres son perfectas para empezar. Si se condimentan bien, y se crea la masa perfecta puedes olvidarte de la carne por un rato. 

Ahora, hablemos de las texturas. Porque es cierto, uno aprende a ver que el mundo no tiene una sola piel, ni un solo color. Que la comida es, una amalgama de cosas pasando al mismo tiempo, como la vida. ¿Por qué no mezclar berenjenas con nueces? Las texturas en cada comida pueden ayudarte a crear un plato mucho más fuerte y con personalidad y al principio, sentir que lo que comes tiene un toque personal es realmente importante.

Y si se sigue por este camino acá hay otra pregunta que debes responderte: ¿Qué tipo de vegetariano quiero ser? En realidad, no hay respuesta incorrecta. Puedes pararte en cualquier punto del espectro; ser sencillamente ovolactovegetariano, aquel que evita el consumo de carne pero no de alimentos derivados de los animales ( como leche, huevos, etc..) o puedes adoptar el veganismo estricto: que evita la carne y todo aquello que provenga de ellos. Lo importante de esta elección es que te sientas bien. No importa el punto en el que te pares o si te mueves de el, lo importante es empezar.  

Y acá el segundo paso: Evita los alimento procesados. Ser vegetariano es cambiar de chip, es entender que cada paso que se da tiene un significado. No todo lo que existe para comer necesaria y obligatoriamente debe entrar a nuestro organismo, porque de ahora en adelante, todas las comidas necesitan nutrirte y algunas comidas no siempre tienen los nutrientes que necesitas. Sí, puede ser dífícil, uno siempre tendrá la necesidad de ese antojo que lo hace enloquecer, pero es necesario reconectarse con la alimentación saludable porque tu cuerpo necesita que aprendas a escucharlo y de ahora en adelante, será vital. 

Ahora bien, ¿Qué es un alimento procesado? Es una pregunta por la cual uno pasa. Esencialmente, es cualquier alimento que haya pasado por un tratamiento industrial para su comercialización. Podría no ser necesariamente malo (algunas hortalizas y legumbres pasan por el proceso y no hay problema para su consumo) pero cuando tienen exceso de edulcorantes, colorantes o conservantes pierden vitaminas y minerales del producto original y ahí su aporte nutricional no es el mismo. 

Asi que aquí va el tercer tip: Hay que conectarse con lo natural. Existen técnicas de cocina, como por ejemplo la fermentación, tan viejas como el tiempo que pueden hacer sintonía contigo en este momento de cambio. Aprender sobre el proceso de las masas madres para el pan, a hacer las mezclas perfectas para las hamburguesas veganas, aprender de los valores proteicos de los alimentos, son experiencias que pueden resonar en ti y ayudarte en el camino y animarte a seguir el recorrido. Todo esto, es para llenarte de vida y de conocimientos esenciales para una nueva alimentación. 

Puede que estos consejos sirvan, pero la única ruta para salir adelante en tus primeros pasos vegetarianos es experimentar. Si, el camino no es recto. Sí, ojalá todos los cambio se dieran en un solo momento, pero no siempre será así: No todos podemos ser Greta Thunberg. No todos podemos ser la persona del año. Pero todos comemos todos los días. Y ahí está el cambio del mundo, en las pequeñas cosas.